Editorial: Montena
Autor: Roberto Pavanello
El
trío Beta son tres murciélagas, Bianca, Bea y Becky y sus amigos Sam (hija del
investigador Bob Sherlock) y Tommy (el mejor amigo de Sam).
En
el castillo de Baskerville se iba a celebrar un desfile de moda de la
prestigiosa diseñadora Vivienne Baskerville, por lo que Becky, gran aficionada
a la moda estaba muy entusiasmada.
Una
mañana, Sam leyó una noticia sobre la desaparición del gato de la señora
Baskerville al que llamaba Príncipe Carlos. Ofrecía como recompensa a quien lo
encontrara una invitación para el desfile.
Bob
Sherlock, llamó por teléfono a su hija Sam para avisar que le habían contratado
para investigar el caso, entonces Sam, sabiendo lo despistado que era su padre
tuvo un plan para ayudarle a resolver el caso, sin que él lo supiera, junto con
el trío Beta y su amigo Tommy.
La
última vez que Baskerville vio al gato fue en la cocina, mientras el ama de
llaves le preparaba su leche especial le dejó el gato a su color-setter (Paul
L`pett) de confianza.
Sam
consiguió la receta de la leche especial para prepararla ellas mismas y
utilizarla como trampa para atraer al
gato; en ese momento entró Paul Lùpett y
sorprendió a Sam que rápidamente ocultó la receta detrás de la espalda y
tiró sin querer una botella de vinagre manchando los guantes de Paul y Sam
quiso quitarle los guantes para limpiárselos, pero él se negó.
Prepararon
una jaula y la leche como cebo, así apareció el gato y lo enjaularon, pero
comprobaron que no llevaba el collar y tenía una mancha negra en el lomo, el
mismo color que Paul utilizaba para sus nuevos diseños, pero tras varias
investigaciones consiguieron averiguar que el ama de llaves había colocado el
collar en el cajón de Paul (en él estaba la fórmula química de colores que se
estaba utilizando en los diseños) para librarse ella de sospechas, pues quería
utilizarlas para vendérsela a la competencia.
Sam
dejó una nota anónima a su padre para que recogiera al gato en una cabaña de
madera y se lo entregara a su dueña. Cuando su padre entregaba al gato, ella a
su vez, desenmascaró al ama de llaves delante de la diseñadora. En
agradecimiento por todo, ésta le regaló un bolsito muy elegante con
brillantitos y que deseaba que lo llevara esa noche para ver el desfile.
Así que todas estaban muy
ilusionadas con el desfile, en especial Becky.
Opinión
personal: Está muy entretenido.
David Ribagorda González
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